En este domingo de Pascuas, 1 de abril, cumple dos años Malaika “Mali” Von Plessen, la hija de Zaia Nara, que está disfrutando de estos feriados con sus padres en la estancia familiar.
Malaika significa “Angel” en lengua africana y fue el nombre elegido por sus papás que desde el primer dÃa le enseñaron a amar y a estar en contacto con la naturaleza.
En su momento contó La Nación el origen del hermoso lugar en el sur donde se encuentra la familia y el tÃtulo de baronesa que le corresponderÃa a la dulce Mali, ahora de dos años.
La pasión del papá de Mali por los caballos la adquirió de su padre, el barón Von Plessen. Pero recién cuando su madre, la decoradora Christl Elizabeth Leitner, heredó una parte de la emblemática estancia “El Boquerón” –construida por Alejandro Bustillo en 1927 para Enrique Anchorena Castellanos y Ercilia Cabral Hunter– de su última pareja, el conde Michel de Ganay Bemberg, pudo darle rienda suelta a su pasión. AhÃ, en ese paraÃso verde ubicado en las afueras de Mar del Plata, no solamente crÃa sus caballos, sino que fue el escenario en el que se consolidó su romance con Zaira Nara.
Amante de la naturaleza, Jakob von Plessen, desde muy joven armó una empresa de turismo que organiza safaris por Africa y expediciones por la Patagonia, región donde ama pasar el tiempo con su familia.
