Por un lado mostró orgullosa las llaves de la nueva casa que la pareja compartirá de ahora en más en un hermoso barrio de Estambul, rodeado de verde, en el medio de un bosque, llaveros con la M (de Mauro) y la E (de Eugenia), para tener acceso a la lujosa mansión que alquiló para Icardi y China Suarez el Galatasaray.
Por el otro son horas dificiles para la actriz, que pronto tendrá que despedirse de sus hijos menores, de 7 y 5 años, porque los niños volverán a Buenos Aires acompañados por su abuela.
Mientras tanto, la hija mayor, con permiso de Nicolás Cabré, su padre, tiene el permiso para comenzar a estudiar a sus 12 años en una escuela internacional de Estambul y permanecerá junto a su madre.
Como se sabe, el que se impuso para que Magnolia y Amancio Vicuña regresen a la Argentina en este fin de semana y retomen su escolaridad local, es su padre.
La decisión de revocar el permiso anterior de tránsito internacional libre para sus hijos fue la que provocó que la actriz publicara un fuertísimo descargo contra Benjamín Vicuña y fueron los abogados de ambas partes los que lograron bajar las aguas y trabajar con permisos temporarios para que los chicos viajen a Estambul, pero con fecha de retorno tras dos semanas de estadía en Turquía.