Ayer, jueves, Federico Bal terminó de dirigir las últimas escenas de su opera prima, “Rumbo al mar”, junto a su padre, Santiago, en una de las escolleras marplatenses, al atardecer y con mucho frÃo.
Después de rodar tres semanas en la provincia de Tucumán y de sumar escenas en Capital Federal, padre e hijo llegaron a Mar del Plata para darle el final a la filmación.
Con mucho de emoción, algo de road movie y la participación de un casting realizado en Tucuman, provincia que subsidió gran parte del filme, Federico Bal seguirá ahora con las tareas de edición y postproducción para llegar al estreno antes de fin de año.