Brindaron por los Gardel, por el homenaje al gran Cacho Castaña, pero sobre todo por ellos, sobrevivientes de la vida y astros populares de la música argentina. Indiscutibles.
AsÃ, después del Opera, Palito Ortega y Charly GarcÃa se sumaron a Cacho y su mujer, Marina Rosenthal, para cenar y charlar hasta altas horas de la madrugada.
Palito siempre es el nexo entre los artistas. El es quien estuvo muy cerca de Cacho cuando estuvo internado y quien se ocupó, personalmente, de darle una oportunidad de familia y contención a Charly en sus dÃas difÃciles. Un grande entre grandes.