Era un canalla de ley y su corazón estaba en su Rosario querida. Por eso, después de la despedida en este mediodÃa de sábado a Gerardo RozÃn en un velatorio de la avenida Independencia en el barrio de Almagro, sus familiares decidieron trasladarlo a Rosario para que descanse en el Cementerio Israelita de su ciudad.
Allà , entre muchos, estuvo su gran amigo desde la primaria, hoy intendente de Rosario, Pablo Javkin, quien en Rosario 3 escribió sobre él: “no conocà a nadie capaz de comunicar tanto con miradas o gestos. Que disfrute hasta la médula de la música. Que estudie las letras y se emocione al punto de soltar toda vergüenza”.
“Obsesivo al extremo, ordenabas en bloque nuestras charlas. Salud, trabajo, amor. Nos dejaste aprender de vos, pensar con vos, sentir y soñar con vos. Y me enseñaste como nadie a tener la guardia alta o bancarse el filo de la ironÃa inteligente”.
Su ex suegro, Julio Bárbaro (Elena, de 12 años, es hija de RozÃn y Carmela Bárbaro) dijo esta mañana que “Gerardo rompió la grieta” y que de todos los sectores hoy lo recuerdan y lo valoran por igual.
Asà lo homenajeó anoche Telefe
