“En los últimos años tomé la postura de no abrir las puertas de mi intimidad, pero lo que me pasa a mí tal vez le pasa a mucha gente y no lo saca para afuera y hay muchas situaciones que tienen soluciones”, comenzó diciendo Luis Ventura en “A la tarde”, al hablar sobre lo que vive por estas horas con la internación de su hijo Antoñito.
“Estamos en presencia de un niño que nació de manera prematura, que tuvo su complejidad a partir de su nacimiento, estuvo en incubadora, que pesó 700 gramos y que hoy tiene 10 años y que tiene un diagnóstico confuso, te dicen que es una rama del autismo, te dicen esto, te dicen lo otro, que tuvo heridas en uno de los hemisferios del cerebro, tengo un hijo que no habla a sus 10 años, pero se hace entender, cuando está feliz, cuando está enojado, cuando quiere hacer pis, hay que saber hablar ese lenguaje”, contó Ventura.
“Tuvo un episodio y puede ser porque tiene hambre o si le duele algo, es una observación permanente del día a día, con una madraza que está las 24 horas con él”, dijo el periodista y agregó “se dio un cambio de medicación del neurólogo y todo es prueba y error, en busca de eliminar un medicamento que tenía que ver con el control de ataques psicóticos que podía tener”.
“Tiene convulsiones, poco frecuentes y convulsiones y cuando tiene un estallido es dificil de controlar”, explicó.
“Antoñito se desborda, me muerde o se desborda y se llega a autoflagelar y eso lleva a estar preocupado y pendiente de él”, dijo.
“Los médicos te dicen que no tiene techo, que tiene todo para crecer y para hablar” agregó.
“