Más allá o más acá de la crítica, sorprendieron los dichos del viernes pasado en Radio Mitre por parte de Jorge Lanata sobre la salud de Wanda Nara.
No sólo llamaron la atención por no ser el tipo de información que ofrece el periodista, sino por la crudeza con que la dio, tratándose de la salud de una persona pública. Un tema que también ocupó a Guillermo Lobo y Nelson Castro en TN y en Telenoche, como si hubiera un interés particular en desarrollarlo en sus medios.
Ante los múltiples comentarios que se despertaron a partir de la información que dio Lanata en la radio, en la noche de este domingo, al frente de su programa televisivo, “PPT”, el periodista decidió explicar su postura y atacar directamente al periodismo de espectaçulos y les dijo “no se comporten como un grupo de seminaristas, porque no lo son”.
Y agregó: “gente que ni siquiera considero periodistas me hablan de ética profesional, por favor mirense al espejo. Vean los programas que hacen, vean los programas que hacen los que mean agua bendita, me acusan de transgredir en serio, me lo dicen en serio. Yo no me siento más que nadie, pero ellos se sienten más que yo y me apuntan con el dedo. Yo el viernes en la radio di una información sensible al aire averigüe antes de darla.Para mí ahí se terminó la historia. Eso es todo. Yo lamento lo que le pasa a Wanda espero que pronto se reponga lo que no creo es que algunos panelistas del espectáculo se puedan curar con la misma rapidez”.
El editorial de Jorge Lanata en #PPT: habló sobre la ética periodística y la salud de Wanda Nara.@PPT_oficial pic.twitter.com/oezhBEkBjd
— eltrece (@eltreceoficial) July 17, 2023
La moral de la televisión
Al referirse a su revelación sobre la salud de Wanda Nara, Lanata afirmó que para él, “lo que la noticia puede generar es empatía hacia quien sufre la enfermedad y lo que me llamó más la atención fueron todos los que se golpearon el pecho y hablo de cierto periodismo de espectáculos que reaccionó indignado hablando de ética y de códigos profesionales.
Y sumó “es terrible porque son los mismos periodistas que a diario hablan, por ejemplo, de infidelidades de una pareja en la que tienen hijos menores o que difunden falsas filiaciones, o que exponen, por ejemplo, pasó hace poco, a hijos desequilibrados a denunciar a sus padres….sin embargo, se golpeaban en el pecho. Yo no espero moral de la televisión, pero realmente ahora tampoco soporto que algunos se comporten como un grupo de seminaristas porque no lo son”.
Seguramente un tema de debate que ocupará espacios en la tele por estos días. Un medio que lo que más disfruta es de mirarse el ombligo.
