Wanda Nara llegó en su ploteado Lamborghini rosa, lista para afrontar la audiencia de divorcio con Mauro Icardi en Milán.
Cada uno se sentó bien separado, junto a sus abogados y el escándalo llegó cuando se vieron primero los videos de las supuestas infidelidades de Wanda y la reacción posterior a los gritos de Icardi pidiendo la tenencia de sus hijas, algo que nada tenía que ver con el juicio en Italia. Ya la justicia italiana dejó en claro que ese tema se tendrá que dirimir en Argentina.
Por lo que sabe habrá nueva audiencia en el mes de julio para definir un divorcio que estaría saliendo a comienzos del 2026.
Y quien esperaba a la salida a Wanda era Maxi López, con quien se fue a comer junto a su mujer, Daniela Christiansson, tras la escandalosa audiencia con Icardi, a quien aguardaba China Suarez.