El 29 de enero pasado nacieron Laia y Aimé, las gemelas de Daniela Celis y Thiago Medina y todo es felicidad para los papás, ocupados 24 horas de sus chicas, pero nunca faltan los envidiosos y los haters que tiran malas vibras.
Así lo sufre por estas horas Dani, una joven de 27 años, madre primeriza con un difícil embarazo gemelar que la llevó a engordar 32 kilos, pero que también hizo que las bebas no tuvieran que ir a incubadora al estar tan bien alimentadas.
Es obvio que Dani se está recuperando lentamente de una cesárea y que tardará un tiempo en sentirse otra vez impecable con su cuerpo, pero es horrible lo que está viviendo con los comentarios de la gente y por eso hizo un fuerte descargo.
Dani es preciosa y está preciosa y es una locura que tenga que salir a explicar que a quince dias del nacimiento de sus hijas sufre las consecuencias de su embarazo.
Daniela y Thiago fueron dos de los jugadores más queridos de la edición anterior de “Gran Hermano” de Argentina y su amor trascendió el reality para convertirse en un hecho de la realidad: una familia con dos hijas que merece todo el respeto, el amor y la comprensión por quien decidió concientemente dar vida.