El capÃtulo 8 de la serie “Maradona, Sueño Bendito” relata la dura experiencia de vida de Cristiana Sinagra junto a el entonces futbolista argentino del Nápoles; cuando queda embarazada y él le pide que aborte contra su voluntad, alentado (según la ficción) por su madre, Doña Tota, quien pensando que podÃa volverse homosexual junto a Guillermo Coppola, le pide a su hija que le presente a la joven italiana para encarrilar sus deseos sexuales.
En esta visión de las relaciones paralelas entre Cristiana, madre de Diego Jr. y Claudia Villafañe, que recordemos tuvieron embarazos casi paralelos (seis meses de diferencia); la historia revictimiza tanto a la mujer que le dio a Maradona su primer hijo como a la madre de Dalma y Gianinna, en las escenas del año 2000 cuando internado en el Cantegrill de Punta del Este y en tiempo de abstinencia el futbolista maltrata a su mujer.
Si tanto como dijeron Maradona aprobó la mirada sobre su historia personal en esta serie, no fue piadoso consigo mismo al permitirse mostrar su costado de padre ausente, implacable con ese hijo que lo buscó durante 29 años sin poder encontrar cariño ni comprensión, pese a que Claudia le pasaba mes por mes una mensualidad acordada. Como asà tampoco se ahorró su denigración a la hora de drogarse hasta casi morir, algo que reconoció en vida.