Miami fue un caos para muchos por estos días, y en el caso de Jimena Baron, si bien fue invitada al viaje. uno de los problemas fue conseguir los tickets para el partido final de la Copa América y el otro un vehículo para movilizarse.
El tema es que ante la demanda insólita de estos días no consiguió canje de autos y decidió alquilar una moto para poder recorrer las grandes distancias del área con su hijo Momo, quien la acompañó en este desafío de llegar a ver campeón a la Argenitna.
Pero esa fue solamente la primera parte de la aventura, porque el momento amargo fue lograr entrar al estadio Hard Rock, como le pasó a muchos y más, llegar a sus asientos y ver que estaban ocupados.
Como contó la propia actriz y cantante “los asientos estaban ocupados por gente que se coló. Ahí no sé cómo subí a Momo a caballito (pesa ya 36 kilos) y empecé a los gritos, pero gritos tipo loca pidiendo que se corran y pisando gente con Momo por el aire. No sé cómo llegamos al asiento”.
Finalmente Jimena pudo disfrutar del demorado partido junto a su hijo y celebrar el nuevo triunfo de la Selección Argentina.
