Como dice su papá, Mirko tiene el record de viajes a su corta edad de 4 años, sin contar la cantidad de personalidades a las que conoció (o que lo conocieron) en todo el mundo, de Maradona al Papa Francisco y de Obama a Susana Gimenez.
Pero ahora, a sus múltiples habilidades, Mirko sumó la de intentar cocinar, cuando pasó por Tatore, de Miami y junto a Teresa aprendió a hacer pizza con su amigo Dante, hijo de Claudia Albertario.
Curioso y activo, Mirko también sirvió helados de distintos gustos, sumandole salsas y se divirtió a lo grande jugando a cocinar con su amigo.
Después de pasar por Miami y de conocer la selva de los monos y de ver a los cocodrilos en los Everglades, llega para él la visita junto a su padre y a Moria Casan de Las Vegas, donde habrá que ver qué programa infantil encuentran para entretenerlo en una ciudad pensada para la vida nocturna.
